El ritmo y las rimas suelen ser actividades muy divertidas para los niños y niñas. El disfrute que experimentan les motiva a participar activamente y mantiene su interés. El movimiento al ritmo de la música (bailar, tocar instrumentos simples…) mejora la coordinación motora fina y gruesa, fomentando la destreza física y la sincronización. Trabajamos de forma divertida y personalizada la improvisación musical, los ritmos y las rimas, para ello realizamos pequeñas coreografías y mímicas.
En el caso de niños y niñas con Trastornos del Espectro Autista, dificultades auditivas o visuales, o trastornos del procesamiento sensorial, la música puede ser una herramienta sensorial poderosa que les ayuda a organizar y procesar mejor la información que reciben del entorno.
Objetivos
Indicado para niños y niñas a partir de 3 años, en forma individual o en pequeño grupo. Especialmente adecuado para menores con Trastorno del Espectro Autista, dificultades de atención, auditivas o visuales, o trastornos del procesamiento sensorial.